La Isla de Tenerife se colocará a la vanguardia de la implantación de una de las fuentes de energía renovable más prometedoras: la geotermia. La empresa Energía Geotérmica de Canarias, que será la encargada de llevar a cabo los trabajos, está formada por el Cabildo de Tenerife, junto al Instituto Tecnológico y de Energías Renovables (ITER) y el Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan), la empresa DISA y la empresa islandesa Reykjyavik Geothermal, comenzará con los primeros sondeos en el mes de otoño de este año. El coste total de las prospecciones superará los 80 millones de euros.
La presidenta del Cabildo, Rosa Dávila, calificó la iniciativa como “un paso histórico para alcanzar la soberanía energética en la isla de Tenerife y conseguir una energía limpia, estable, infinita, que no deja huella de carbono sin renunciar a nuestro paisaje y a nuestra biodiversidad. Por ello- añadió Dávila- el poder de Tenerife se pone en marcha, y lo hace con esta alianza estratégica de colaboración público privada”, señaló Dávila quien estuvo acompañada en la rueda de prensa de presentación del proyecto por el consejero de Innovación, Investigación y Desarrollo, Juan José Martínez; el director de DISA Renovables, Joaquín Gurriarán; el director de Energía de DISA, Santiago Rull; el CEO y director de Reykjavik Geothermal, Magnús Dagur Ásbjörnsson; y el director del área de Medioambiente del Instituto Tecnológico de Energías Renovables (ITER) y coordinador científico del Involcan, Nemesio Pérez.
Por su parte, Juan José Martínez, señaló que se ha realizado una labor de investigación muy importante para establecer los puntos en donde se va a realizar la exploración. “En 2024, la agrupación promotora del proyecto ha llevado a cabo estudios superficiales con resultados prometedores: existiría agua y calor superior a los 150°C a una profundidad de 2.500 metros en las zonas sur y oeste de la isla. Esta tecnología se caracteriza por una mínima afección al territorio —ocupa poco espacio—, estabilidad y seguridad en la producción energética y cero emisiones contaminantes”
En palabras del director de energía del Grupo Disa, Santiago Rull Cullen:” Este proyecto será el primero de su tipo en España y representa un paso decisivo hacia un futuro energético más sostenible. Para hacerlo realidad y garantizar su viabilidad técnico-económica, necesitamos apoyo a la inversión y una tarifa justa que impulse su crecimiento dentro de la matriz de generación de las islas. Es una oportunidad única para demostrar que un cambio real es posible.”.
Así mismo, Joaquín Gurriarán; el director de Energía de DISA, explicó que se han analizado más de 17.000 hectáreas de la isla para ver qué ocurre en el subsuelo y se han señalado algunas zonas por lo que los resultados son prometedores”
Por otra parte, el director de Reykjavik Geothermal, Magnús Dagur Ásbjörnsson, felicitó al Cabildo de Tenerife la apuesta y puso como ejemplo el caso de Islandia en donde “la geotermia genera el 60 por ciento de la energía que utilizamos y Tenerife es un gran candidato por lo que nos alegra muchísimo este proyecto”·
La primera investigación en el subsuelo de Tenerife se realizará en el sur de la isla, donde existen fundadas esperanzas de encontrar altas temperaturas que permitan la producción de vapor de agua para mover las turbinas que generarán, según el yacimiento, entre cinco y veinte megavatios, una energía con la que se puede abastecer una ciudad como Santa Cruz durante todo un año.
Frente a otras fuentes de generación, la geotermia presenta una importantísima serie de ventajas diferenciales. La primera, su baja ocupación de suelo y su escaso impacto en el territorio. Toda la estructura que se utiliza para los sondeos iniciales en busca de calor desaparece cuando se detecta una fuente de energía.
Las instalaciones necesarias para la generación, básicamente turbinas y conducciones de vapor, ocupan una superficie muy pequeña, muy lejos del impacto visual de los parques eólicos o fotovoltaicos con quienes sí comparte una extraordinaria virtud: no contamina. En un territorio limitado y altamente protegido, como el de Tenerife, la baja ocupación de suelo —hasta veintidós veces menos que cualquier otra renovable en equivalencia de generación— constituye otro elemento a tener en cuenta.
Las ventajas de la geotermia
Una de las ventajas adicionales de la geotermia profunda, como es el caso de la que se realizará en la isla de Tenerife, es que usualmente encuentra a grandes profundidades reservas de agua que no son accesibles por métodos tradicionales ni aptas para el consumo humano. Esa agua, que se encuentra a altas temperaturas, se utiliza, convertida en vapor, en el funcionamiento de las turbinas, y termina su función con un altísimo grado de pureza, con lo que puede servir para aumentar la oferta de agua para uso agrícola o consumo doméstico.
El proyecto en Tenerife ha podido acometerse en buena medida por el incentivo del Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía de España (IDAE) que ha cofinanciado los estudios iniciales y las prospecciones con fondos Next Generation de la Unión Europea. Estas ayudas cubren el 50% del coste de la inversión.
¿Por qué la geotermia? Esta tecnología es clave para el futuro energético de Tenerife. Puede constituir un recurso que contribuirá decisivamente a nuestra independencia energética. Es una fuente de energía fiable y continua, porque no depende del clima, que ayuda a dar estabilidad a las redes de distribución y sustituye de forma eficiente al obsoleto parque de generación convencional.
La geotermia elimina las emisiones de CO2 a la atmósfera contribuyendo al objetivo de la descarbonización de las islas y la duración del suministro es casi ilimitada, puesto que la vida útil de un yacimiento se puede extender durante una enorme cantidad de años. Además, a un coste inferior a los 300 €/MWh que actualmente se abona a la generación convencional.
La tarifa: asignatura pendiente
La geotermia es una energía limpia que espera bajo tierra: constante, con una huella ambiental mínima y que puede desempeñar un papel crucial en la reducción de apagones al aportar estabilidad al sistema eléctrico.
Si algún inconveniente tiene la geotermia es el elevado coste de las inversiones necesarias para su puesta en marcha. Primero en las investigaciones del subsuelo y, posteriormente, en las perforaciones, que no siempre garantizan el éxito. Los países más avanzados en geotermia suelen tener varias cosas en común: marcos regulatorios específicos, claros y estables y tarifas adecuadas, que dan confianza para invertir.
En España, de momento, hay avances en normativas y ayudas, pero falta el marco tarifario que es esencial para dar seguridad a las grandes inversiones que se acometen en este tipo de proyectos, algo que otros países, como Italia o Islandia, ya resolvieron hace tiempo. En Europa, las tarifas de retribución (feed-in tariffs) para proyectos geotérmicos iniciales oscilan entre 200 y 300 €/MWh. En este contexto, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ha manifestado su intención de replicar este modelo en nuestro país.
En este sentido, el director científico del ITER, Nemesio Pérez: «La falta de una tarifa específica para la generación eléctrica a partir de recursos geotérmicos en España puede ser un obstáculo significativo para atraer inversores para el desarrollo de proyectos geotérmicos. Sin una tarifa regulada o un esquema de incentivos claro (como tarifas feed-in o subastas específicas), los inversores no pueden prever con certeza los ingresos futuros del proyecto, lo que aumenta el riesgo financiero, generando una importante incertidumbre económica».
Así y todo, EGC pondrá en marcha a partir de otoño sus sondeos en el sur de Tenerife. El municipio en el que se desarrolle el primer sondeo – pendiente de la Autorización Administrativa del Gobierno de Canarias – será pionero en una energía llamada a revolucionar el mundo de las renovables y en colocar a Canarias, a medio plazo, en posición de eliminar su dependencia de las importaciones de combustibles tradicionales.
Plazos
El retraso en la resolución de los concursos mineros y en la obtención de las autorizaciones administrativas para ejecutar los sondeos pone en riesgo el cumplimiento del plazo fijado por el IDAE para ejecutar los proyectos de geotermia, previsto para enero de 2026. A ello se suman los tiempos necesarios para negociar contratos complejos con las empresas encargadas de realizar los sondeos y gestionar la logística de equipos.
Dado que se trata de un proyecto pionero en España, con alta complejidad técnica y ubicado en una Región Ultraperiférica con condiciones logísticas exigentes, se ha solicitado al IDAE una ampliación mínima de un año en los plazos de ejecución, con el objetivo de no perder esta oportunidad estratégica para Canarias.